Entrenamiento de voleibol

El voleibol es un deporte que exige un alto nivel de forma física, que abarca fuerza, agilidad, velocidad y resistencia. Un entrenamiento de voleibol completo está diseñado para mejorar estos atributos, garantizando que los jugadores estén equipados para rendir al máximo. Tanto si eres un principiante como un jugador de élite, incorporar un entrenamiento de voleibol a tu rutina es crucial para mejorar tu juego.

Imagen de la tarjeta
Sub-12
Power Passer #1 un Desafío de Pases
Imagen de la tarjeta
Sub-18
Skill Shuffle #1 a Ball Control Challenge Tball
Imagen de la tarjeta
sub12, sub18, sub6, Seniors
Escucho los colores
Imagen de la tarjeta
Sub-12
Samurai Setter #1 un reto de ambientación
Imagen de la tarjeta
Sub-6
Sentados sobre control
Imagen de la tarjeta
Sub-18, Mayores
Doble ataque de red

Entrenamiento típico de voleibol

Un entrenamiento típico de voleibol debe comenzar con un calentamiento dinámico. Esto incluye ejercicios como footing, rodillas en alto, patadas a los glúteos y círculos con los brazos, que aumentan el ritmo cardiaco y el flujo sanguíneo a los músculos. Los estiramientos dinámicos, centrados en las piernas, los brazos y el tronco, preparan el cuerpo para la intensa actividad que viene a continuación. Véalo aquí ejercicios de calentamiento.

Entrenamiento de fuerza

El entrenamiento de fuerza es un componente esencial del entrenamiento de voleibol. Ejercicios como sentadillas, estocadas y peso muerto fortalecen la parte inferior del cuerpo, esencial para realizar saltos potentes y movimientos rápidos en la pista. La fuerza de la parte superior del cuerpo, crucial para el golpeo y el bloqueo, puede desarrollarse mediante ejercicios como las flexiones, los presses por encima de la cabeza y las dominadas. La fuerza del tronco, vital para la estabilidad y la potencia en el voleibol, se mejora con planchas, giros rusos y ejercicios con balones medicinales.

Agilidad y velocidad

La agilidad y la velocidad también son fundamentales para los jugadores de voleibol. Ejercicios como los ejercicios de escalera, los ejercicios de conos y los sprints cortos mejoran el juego de pies, la coordinación y la capacidad de cambiar de dirección rápidamente. Estos ejercicios de voleibol imitan los rápidos movimientos necesarios durante un partido de voleibol.

El entrenamiento de resistencia no debe pasarse por alto en un entrenamiento de voleibol. Actividades como las carreras de larga distancia, el entrenamiento por intervalos o el entrenamiento en circuito ayudan a desarrollar la resistencia, garantizando que los jugadores puedan mantener su rendimiento durante todo el partido.

No olvides el enfriamiento y los estiramientos

Por último, un entrenamiento de voleibol debe terminar siempre con un enfriamiento y estiramientos. Esto ayuda a la recuperación muscular, reduce el dolor y aumenta la flexibilidad. Los ejercicios de estiramiento deben centrarse en todos los grupos musculares principales, con especial atención a los más utilizados durante el juego de voleibol.

La incorporación de estos elementos a un entrenamiento de voleibol dará como resultado un atleta completo, capaz de satisfacer las exigencias físicas de este deporte. Un entrenamiento regular, combinado con una nutrición adecuada y un descanso apropiado, mejorará significativamente el rendimiento del jugador en la cancha.

Compartir